Categoría: 4. ORACIÓN

La cuarta parte, titulada «La oración cristiana», ofrece una síntesis de la lex orandi, es decir, de la vida de oración. A ejemplo de Jesús, modelo perfecto de orante, también el cristiano está llamado al diálogo con Dios en la oración, de la que es expresión privilegiada el Padre Nuestro, la oración que nos enseñó el mismo Jesús. Devociones.

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Las peticiones del Padre nuestro

LAS SIETE PETICIONES del Padre nuestro

587. ¿Cómo está compuesta la oración del Señor?

La oración del Señor contiene siete peticiones a Dios Padre. Las tres primeras, más teologales, nos atraen hacia Él, para su gloria, pues lo propio del amor es pensar primeramente en Aquel que amamos. Estas tres súplicas sugieren lo que, en particular, debemos pedirle: la santificación de su Nombre, la venida de su Reino y la realización de su voluntad. Las cuatro últimas peticiones presentan al Padre de misericordia nuestras miserias y nuestras esperanzas: le piden que nos alimente, que nos perdone, que nos defienda ante la tentación y nos libre del Maligno.

588. ¿Qué significa «Santificado sea tu Nombre»?

Santificar el Nombre de Dios es, ante todo, una alabanza que reconoce a Dios como Santo. En efecto, Dios ha revelado su santo Nombre a Moisés, y ha querido que su pueblo le fuese consagrado como una nación santa en la que Él habita.

589. ¿Cómo se santifica el Nombre de Dios en nosotros y en el mundo?

Santificar el Nombre de Dios, que «nos llama a la santidad» (1Ts 4, 7), es desear que la consagración bautismal vivifique toda nuestra vida. Asimismo, es pedir que, con nuestra vida y nuestra oración, el Nombre de Dios sea conocido y bendecido por todos los hombres.

590. ¿Qué pide la Iglesia cuando suplica «Venga a nosotros tu Reino»?

La Iglesia invoca la venida final del Reino de Dios, mediante el retorno de Cristo en la gloria. Pero la Iglesia ora también para que el Reino de Dios crezca aquí ya desde ahora, gracias a la santificación de los hombres en el Espíritu y al compromiso de éstos al servicio de la justicia y de la paz, según las Bienaventuranzas. Esta petición es el grito del Espíritu y de la Esposa: «Ven, Señor Jesús» (Ap 22, 20).

591. ¿Qué pedimos al decir «Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo»?

La voluntad del Padre es que «todos los hombres se salven» (1Tm 2, 4). Para esto ha venido Jesús: para cumplir perfectamente la Voluntad salvífica del Padre. Nosotros pedimos a Dios Padre que una nuestra voluntad a la de su Hijo, a ejemplo de María Santísima y de los santos. Le pedimos que su benevolente designio se realice plenamente sobre la tierra, como se ha realizado en el cielo. Por la oración, podemos «distinguir cuál es la voluntad de Dios» (Rm 12, 2), y obtener «constancia para cumplirla» (Hb 10, 36).

592. ¿Cuál es el sentido de la petición «Danos hoy nuestro pan de cada día»?

Al pedir a Dios, con el confiado abandono de los hijos, el alimento cotidiano necesario a cada cual para su subsistencia, reconocemos hasta qué punto Dios Padre es bueno, más allá de toda bondad. Le pedimos también la gracia de saber obrar, de modo que la justicia y la solidaridad permitan que la abundancia de los unos cubra las necesidades de los otros.

593. ¿Cuál es el sentido específicamente cristiano de esta petición?

Puesto que «no sólo de pan vive el hombre, sino de todo lo que sale de la boca de Dios» (Mt 4, 4), la petición sobre el pan cotidiano se refiere igualmente al hambre de la Palabra de Dios y del Cuerpo de Cristo, recibido en la Eucaristía, así como al hambre del Espíritu Santo. Lo pedimos, con una confianza absoluta, para hoy, el hoy de Dios: y esto se nos concede, sobre todo, en la Eucaristía, que anticipa el banquete del Reino venidero.

594. ¿Por qué decimos «Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden»?

Al pedir a Dios Padre que nos perdone, nos reconocemos ante Él pecadores; pero confesamos, al mismo tiempo, su misericordia, porque, en su Hijo y mediante los sacramentos, «obtenemos la redención, la remisión de nuestros pecados» (Col 1, 14). Ahora bien, nuestra petición será atendida a condición de que nosotros, antes, hayamos, por nuestra parte, perdonado.

595. ¿Cómo es posible el perdón?

La misericordia penetra en nuestros corazones solamente si también nosotros sabemos perdonar, incluso a nuestros enemigos. Aunque para el hombre parece imposible cumplir con esta exigencia, el corazón que se entrega al Espíritu Santo puede, a ejemplo de Cristo, amar hasta el extremo de la caridad, cambiar la herida en compasión, transformar la ofensa en intercesión. El perdón participa de la misericordia divina, y es una cumbre de la oración cristiana.

596. ¿Qué significa «No nos dejes caer en la tentación»?

Pedimos a Dios Padre que no nos deje solos y a merced de la tentación. Pedimos al Espíritu saber discernir, por una parte, entre la prueba, que nos hace crecer en el bien, y la tentación, que conduce al pecado y a la muerte; y, por otra parte, entre ser tentado y consentir en la tentación. Esta petición nos une a Jesús, que ha vencido la tentación con su oración. Pedimos la gracia de la vigilancia y de la perseverancia final.

597. ¿Por qué concluimos suplicando «Y líbranos del mal»?

El mal designa la persona de Satanás, que se opone a Dios y que es «el seductor del mundo entero» (Ap 12, 9). La victoria sobre el diablo ya fue alcanzada por Cristo; pero nosotros oramos a fin de que la familia humana sea liberada de Satanás y de sus obras. Pedimos también el don precioso de la paz y la gracia de la espera perseverante en el retorno de Cristo, que nos librará definitivamente del Maligno.

598. ¿Qué significa el «Amén» final?

«Después, terminada la oración, dices: Amén, refrendando por medio de este Amén, que significa “Así sea”, lo que contiene la oración que Dios nos enseñó» (San Cirilo de Jerusalén).

Abwun dvashmaya: Padre nuestro, que estás en el cielo

La invocación a Dios como Padre nuestro que está en el cielo indica nuestra relación nueva con Él en Cristo.

Es oración de encargo, cuando Jesús ora dice padre mío yo te doy gracias, a nosotros nos dice padre nuestro en los cielos, no somos en eso iguales a Jesús que dice yo y el padre somos uno, el que me ha visto a mi ha visto al padre.
Nos hace reflexionar sobre con quién estamos hablando.
Inciso para decir que hoy falta la figura del padre a muchos como el ser que ama y fortalece. Yo si tuve ese padre que me enseñó a orar, en cambio seguramente no puedo decirlo para mis hijos.
Por eso quizá hoy no sé entiende lo de llámale padre muchas veces al día:


Padre pero no mío, no rezo como yo, sino como hombre, miembro de una familia, y no a un ser conmigo aquí sino en el cielo que es el lugar del amor trinitario, no es una oración al padre sino al que nos ama, que es Trinidad: amante, amado y amor, que no nos ama porque está solo y se aburre, no nos crea para que le hagamos feliz, sino para acompañarnos, hacernos felices. El cielo no es un lugar apartado, son los cielos porque es lugar donde las almas son amadas por Dios, no es un lugar sino un accidente, el ubi de la compañía divina.

«PADRE NUESTRO QUE ESTÁS EN EL CIELO»

582. ¿Por qué podemos acercarnos al Padre con plena confianza? (Qué es.)

Podemos acercarnos al Padre con plena confianza, porque Jesús, nuestro Redentor, nos introduce en la presencia del Padre, y su Espíritu hace de nosotros hijos de Dios. Por ello, podemos rezar el Padre nuestro con confianza sencilla y filial, gozosa seguridad y humilde audacia, con la certeza de ser amados y escuchados.

583. ¿Cómo es posible invocar a Dios como «Padre»? (Para qué.)

Podemos invocar a Dios como «Padre», porque el Hijo de Dios hecho hombre nos lo ha revelado, y su Espíritu nos lo hace conocer. La invocación del Padre nos hace entrar en su misterio con asombro siempre nuevo, y despierta en nosotros el deseo de un comportamiento filial. Por consiguiente, con la oración del Señor, somos conscientes de ser hijos del Padre en el Hijo.

584. ¿Por qué decimos Padre «nuestro»? (Quién.)

«Nuestro» expresa una relación con Dios totalmente nueva. Cuando oramos al Padre, lo adoramos y lo glorificamos con el Hijo y el Espíritu. En Cristo, nosotros somos su pueblo, y Él es nuestro Dios, ahora y por siempre. Decimos, de hecho, Padre «nuestro», porque la Iglesia de Cristo es la comunión de una multitud de hermanos, que tienen «un solo corazón y una sola alma» (Hch 4, 32).

585. ¿Con qué espíritu de comunión y de misión nos dirigimos a Dios como Padre «nuestro»? (Cómo.)

Dado que el Padre nuestro es un bien común de los bautizados, éstos sienten la urgente llamada a participar en la oración de Jesús por la unidad de sus discípulos. Rezar el Padre nuestro es orar con todos los hombres y en favor de la entera humanidad, a fin de que todos conozcan al único y verdadero Dios y se reúnan en la unidad.

586 ¿Qué significa la expresión «que estás en el cielo»? (Dónde.)

La expresión bíblica «cielo» no indica un lugar sino un modo de ser: Dios está más allá y por encima de todo; la expresión designa la majestad, la santidad de Dios, y también su presencia en el corazón de los justos. El cielo, o la Casa del Padre, constituye la verdadera patria hacia la que tendemos en la esperanza, mientras nos encontramos aún en la tierra. Vivimos ya en esta patria, donde nuestra «vida está oculta con Cristo en Dios» (Col 3, 3).

(¿Falta el cuándo?)

Escuela de oración:

Abwun dvashmaya
(Our father who is in heaven.)

abwun = our Father
d-va-shmaya = of whom/which – in – heaven

Nethqadash shmakh
(May your name be holy.)

nethqadash = will be holy
shmakh = your name
Note: The imperfect or “future” tense can be used in some cases as an adjuration, i.e. “May so-and-so happen.”

Tethe malkuthakh
(May your kingdom come.)

tethe = it will come
malkuthakh = your kingdom

Nehweh tsevyanakh
(May your will be [done])

nehweh = it will be
tsevyanakh = “your will” or “your desire”
Note: This literally means closest to “Your will will be” which is awkward in English at best.

Aykana dvashmaya
(As it is in heaven)

aykana = like, as
d-va-shmaya = of whom/which – in – heaven

Af bar`a
(Also [be] on the earth)

af = also
b-ar`a = in/on – the earth

Hav lan lakhma
(Give us bread)

hav = give
lan = to us
lakhma = bread

Dsoonqanan yomana
(That we need today)

d-soonqanan = of which – we lack/need
yomana = “today” or “daily”

Ushvuq lan khaubeyn
(And forgive our sins)

u-shvuq = and allow/forgive
lan = unto us
khaybeyn = our sins/debts/shortcommings

Aykana d’af khnan
(Also as we)

aykana = like
d-af = in the same manner – also
khnan = we

Shvaqan lkhaiveyn
(Have forgiven sinners)

shvaqan = we’ve forgiven
l-khaiveyn = unto – sinners/debtors/the guilty, etc.

U’la te`lan lnisyouna
(And don’t lead us into danger.)

u-la = and – not
te`lan = “lead us” or “cause us to enter” (could be either due to verbal form ambiguity)
l-nisyouna = unto – danger/temptation

Ela patsan men bisha
(But deliver us from evil)

ela = but
patsan = deliver us
men = from
bisha = evil

Metul d’dheelakh hee malkootha
(Because the Kingdom is yours.)

metul = because
d-dheelakh = of which – “yours” (it’s a grammatical construct signifying ownership which is a bit complicated to explain here)
hee = is
malkootha = kingdom

Ukhaila utheshbookhtha
(And the power, and the glory)

u-khaila = and – power
u-theshbooktha = and- glory

`Alam l`almeen
(Forever; To eternity)

`alam = forever
l-`almeen = unto – the ages (idiom. “eternity”)
Ameyn
(Amen)
ameyn = “truly” or “it is truth!” traditional ending to prayer or an oath (e.g. “ameyn ameyn amarna lakh” = “truly, truly I’m telling you!” or “I swear!”)

Padre nuestro

Introducción al Padre nuestro

578. ¿Cuál es el origen del Padre nuestro?

Jesús nos enseñó el Padre nuestro, un día en que un discípulo le rogó: «Maestro, enséñanos a orar» (Lc 11, 1). La liturgia de la Iglesia usa el texto de San Mateo (6, 9-13).

579. ¿Qué lugar ocupa el Padre nuestro en las Escrituras?

El Padre nuestro es «el resumen de todo el Evangelio» (Tertuliano); «es la más perfecta de todas las oraciones» (Santo Tomás de Aquino). Situado en el centro del Sermón de la Montaña (Mt 5-7), recoge en forma de oración el contenido esencial del Evangelio.

580. ¿Por qué se le llama «la oración del Señor»?

Al Padre nuestro se le llama «Oración dominical», es decir «la oración del Señor», porque nos la enseñó el mismo Jesús, nuestro Señor.

581. ¿Qué lugar ocupa el Padre nuestro en la oración de la Iglesia?

Oración por excelencia de la Iglesia, el Padre nuestro es «entregado» en el Bautismo, para manifestar el nacimiento nuevo a la vida divina de los hijos de Dios. La Eucaristía revela el sentido pleno del Padre nuestro, puesto que sus peticiones, fundándose en el misterio de la salvación ya realizado, serán plenamente atendidas con la Segunda venida del Señor. El Padre nuestro es parte integrante de la Liturgia de las Horas.

El combate de la oración: el cuándo y el cómo

EL COMBATE DE LA ORACIÓN

572. ¿Por qué la oración es un combate?

Porque el que ora combate contra sí mismo, contra el ambiente y, sobre todo, contra el Tentador, que hace todo lo posible para apartarlo de la oración. Es inseparable del progreso en la vida espiritual: se vive como se ora.

573. ¿Cuáles son las objeciones a la oración?

Muchos piensan que no tienen tiempo para orar o que es inútil orar. Hay dificultades o aparentes fracasos. Para vencer estos obstáculos son necesarias la humildad, la confianza y la perseverancia.

574. ¿Cuáles son las dificultades?

La distracción, que separa de la atención a Dios, y puede incluso descubrir aquello a lo que realmente estamos apegados. Se supera volviendo a Dios con humildad. La sequedad, se supera con fe en el Señor incluso sin consuelo sensible. La acedía o pereza espiritual, debida al relajamiento de la vigilancia y al descuido de la custodia del corazón (se supera con diligencia).

575. ¿Cómo fortalecer nuestra confianza filial (ante el desánimo o fracaso)?

La confianza filial se pone a prueba cuando pensamos que no somos escuchados. ¿Dios es para nosotros un Padre cuya voluntad deseamos cumplir, o un medio para obtener lo que queremos? Si nuestra oración se une a la de Jesús, Él nos concede mucho más que este o aquel don: recibimos al Espíritu Santo, que transforma nuestro corazón.

576. ¿Es posible orar en todo momento?

Orar es siempre posible: Cristo resucitado está con nosotros «todos los días» (Mt 28, 20). Oración y vida cristiana son inseparables.

577. ¿Cuál es la oración de la Hora de Jesús?

La oración sacerdotal de Éste en la Última Cena, cuando llega la Hora de su sacrificio.

Tres temas:

Sobre la oración de Jesús:

-Aprendamos a poner ante Dios los esfuerzos de cada día para seguirlo.

-Supliquemos que nos haga sentir su cercanía.

-Confiemos en su providencia para conformar nuestra voluntad a la suya, repitiendo cada día el sí de Jesús y de María.

Sobre el aburrimiento en la oración, la necesidad de la conversión, que pasa por el encuentro con Cristo doliente:

Sobre la oración y la vida (y viceversa: la vida debe ir acompañada de oración porque Dios quiere que le pidamos, pero la oración debe llevar a la acción):

A Dios rogando:

Y si hay tiempo para ver la vida de uno de esos santos caracterizados por su vida de oración, por qué no santa Gema Galgani:

Las expresiones de la oración

568. ¿Cuáles son las expresiones de la vida de oración?

La tradición cristiana ha conservado tres modos principales de expresar y vivir la oración: la oración vocal, la meditación y la oración contemplativa. Su rasgo común es el recogimiento del corazón.
LAS EXPRESIONES DE LA ORACIÓN

569. ¿En qué se caracteriza la oración vocal?

La oración vocal asocia el cuerpo a la oración interior del corazón; incluso quien practica la más interior de las oraciones no podría prescindir del todo en su vida cristiana de la oración vocal. En cualquier caso, ésta debe brotar siempre de una fe personal. Con el Padre nuestro, Jesús nos ha enseñado una fórmula perfecta de oración vocal.

570. ¿Qué es la meditación?

La meditación es una reflexión orante, que parte sobre todo de la Palabra de Dios en la Biblia; hace intervenir a la inteligencia, la imaginación, la emoción, el deseo, para profundizar nuestra fe, convertir el corazón y fortalecer la voluntad de seguir a Cristo; es una etapa preliminar hacia la unión de amor con el Señor.

571. ¿Qué es la oración contemplativa?

La oración contemplativa es una mirada sencilla a Dios en el silencio y el amor. Es un don de Dios, un momento de fe pura, durante el cual el que ora busca a Cristo, se entrega a la voluntad amorosa del Padre y recoge su ser bajo la acción del Espíritu. Santa Teresa de Jesús la define como una íntima relación de amistad: «estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos que nos ama».

Si se busca en youtube cuáles son los vídeos más vistos con la palabra oración son los del canal Sangre y agua. El más visto es esta oración por la mañana:

El recogimiento característico de la oración exige una humildad que puede llamarse anodadamiento, que es central en la doctrina de San Juan de la Cruz:

Esta humildad la vemos en esta oración del cardenal Merry del Val:

La interesante historia de este cardenal español que fue secretario de Estado de san Pío X la recuerda el papa Francisco en este encuentro con su familia:

Maestros, lugares y momentos para la oración

MAESTROS DE ORACIÓN

564. ¿Los santos son maestros de la oración?

Los santos son para los cristianos modelos de oración; su intercesión es el más alto servicio que prestan al designio de Dios. En la comunión de los santos, a lo largo de la historia de la Iglesia, se han desarrollado diversos tipos de espiritualidad, que enseñan a vivir y a practicar la oración.

565. ¿Quién puede enseñar a rezar?

La familia cristiana constituye el primer ámbito de educación a la oración. Hay que recomendar la oración cotidiana en familia, pues es el primer testimonio de vida de oración de la Iglesia. La catequesis, los grupos de oración, la «dirección espiritual» son una escuela y una ayuda para la oración.

(Juan Pablo II: la familia que reza unida permanece unida.)

566. ¿Cuáles son los lugares favorables para la oración?

Se puede orar en cualquier sitio, pero elegir bien el lugar tiene importancia para la oración. El templo es el lugar propio de la oración litúrgica y de la adoración eucarística; también otros lugares ayudan a orar, como «un rincón de oración» en la casa familiar, un monasterio, un santuario.

CAPÍTULO TERCERO

LA VIDA DE ORACIÓN

567. ¿Qué momentos son los más indicados para la oración?

Todos los momentos son indicados para la oración, pero la Iglesia propone a los fieles ritmos destinados a alimentar la oración continua: oración de la mañana y del atardecer, antes y después de las comidas, la Liturgia de la Horas, la Eucaristía dominical, el Santo Rosario, las fiestas del año litúrgico.

«Es necesario acordarse de Dios más a menudo que de respirar» (San Gregorio Nacianceno).

Consejos de Teresa de Jesús sobre la oración mental y la oración de recogimiento:

Tradición, fuentes y camino de la oración

CAPÍTULO SEGUNDO

LA TRADICIÓN DE LA ORACIÓN

557. ¿Cuál es la importancia de la Tradición respecto a la oración?

El Espíritu Santo enseña a orar en la Tradición de la Iglesia, porque la oración no solo manifiesta un impulso interior, sino que implica contemplación, estudio y comprensión de realidades espirituales que se experimentan (en la Tradición).

FUENTES DE LA ORACIÓN

558. ¿Cuáles son las fuentes de la oración cristiana?

La Palabra de Dios; la Liturgia que comunica el misterio de la salvación; las virtudes teologales; las situaciones cotidianas, porque en ellas podemos encontrar a Dios.

«Te amo, Señor, y la única gracia que te pido es amarte eternamente. Dios mío, si mi lengua no puede decir en todos los momentos que te amo, quiero que mi corazón te lo repita cada vez que respiro» (San Juan María Vianney).

EL CAMINO DE LA ORACIÓN

559. ¿Hay en la Iglesia diversos caminos de oración?

En la Iglesia hay diversos caminos de oración, en fidelidad a la tradición y referidos siempre a Jesucristo.

560. ¿Cuál es el camino de nuestra oración?

Cristo. Oramos en el Nombre de Jesús. Su humanidad es la única vía por la que el Espíritu Santo nos enseña a orar a Dios nuestro Padre. Por esto las oraciones litúrgicas concluyen con la fórmula: «Por Jesucristo nuestro Señor».

561. ¿Cuál es el papel del Espíritu Santo en la oración?

Es el Maestro interior de la oración cristiana, la Iglesia nos exhorta a invocarlo e implorarlo en toda ocasión: «¡Ven, Espíritu Santo!».

562. ¿Es mariana la oración cristiana?

Por la singular cooperación de María con la acción del Espíritu Santo, la Iglesia ama rezar a María y orar con María, la orante perfecta, para alabar e invocar con Ella al Señor. Pues María, en efecto, nos «muestra el camino» que es su Hijo, el único Mediador.

563. ¿Cómo reza la Iglesia a María?

Con el Ave María la Iglesia pide la intercesión de la Virgen. Otras oraciones marianas son el Rosario, el himno Acáthistos, la Paraclisis, los himnos y cánticos de las diversas tradiciones cristianas.

Las cuatro formas de oración de la Iglesia

LA ORACIÓN EN EL TIEMPO DE LA IGLESIA

548. ¿Cómo oraba la primera comunidad cristiana?

Los creyentes «acudían asiduamente a las enseñanzas de los apóstoles, a la comunión, a la fracción del pan y a las oraciones» (Hch 2, 42).

549. ¿Cómo interviene el Espíritu Santo en la oración?

Educa a la Iglesia y le hace entrar en la contemplación y en la unión con Cristo.

550. ¿Cuáles son las formas de oración cristiana?

1) La bendición y acción de gracias; 2) la adoración y la alabanza, 3) la petición y 4) expiación -petición de perdón- (ambas por sí mismo o por otros: intercesión). La Eucaristía contiene y expresa todas.

551. ¿Qué es la bendición?

La respuesta agradecida del hombre a los dones de Dios.

555. ¿Cuándo se da gracias a Dios?

Incesantemente. En la Eucaristía Cristo hace partícipe a la Iglesia de su acción de gracias al Padre. Todo es para el cristiano motivo de acción de gracias.

552. ¿Cómo se puede definir la adoración?

La prosternación de la criatura ante su Creador.

556. ¿Qué es la oración de alabanza?

La alabanza reconoce que Dios es Dios; es desinteresada: le da gloria por lo que Él es.

553. ¿Cuáles son las diversas formas de la oración de petición?

La oración de petición puede adoptar diversas formas: petición de perdón o también por nuestras necesidades espirituales y materiales.

554. ¿En qué consiste la intercesión?

La intercesión consiste en pedir en favor de otro. Nos une con la oración de Jesús, que intercede ante el Padre por todos los hombres, en particular por los pecadores. Debe extenderse también a los enemigos.

La Oración en el huerto PROCACCINI, GIULIO CESARE, 1616-1620. Museo Nacional del Prado.

La oración de Jesús y María

LA ORACIÓN ES PLENAMENTE REVELADA Y REALIZADA EN JESÚS

541. ¿De quién aprendió Jesús a orar?

Conforme a su corazón de hombre, Jesús aprendió a orar de su madre y de la tradición judía. Pero su oración brota de una fuente más secreta, puesto que es el Hijo de Dios que, en su humanidad santa, dirige a su Padre la oración filial perfecta.

542. ¿Cuándo oraba Jesús?

Frecuentemente; en soledad, con preferencia durante la noche; ora antes de los momentos decisivos de su misión o de la misión de sus apóstoles. De hecho toda la vida de Jesús es oración, pues está en constante comunión de amor con el Padre.

543. ¿Cómo oró Jesús en su pasión?

Tomando sobre sí todas las angustias de la humanidad, todas las súplicas e intercesiones de la historia de la salvación; las presenta al Padre, quien las acoge y escucha, más allá de toda esperanza, resucitándolo de entre los muertos.

544. ¿Cómo nos enseña Jesús a orar?

Con pureza del corazón, que busca el Reino y perdona a los enemigos; con confianza audaz y filial, que va más allá de lo que sentimos y comprendemos; con vigilancia, que protege al discípulo de la tentación.

545. ¿Por qué es eficaz nuestra oración?

Porque está unida mediante la fe a la oración de Jesús. En Él la oración cristiana se convierte en comunión de amor con el Padre: «Pedid y recibiréis, para que vuestro gozo sea colmado» (Jn 16, 24).

546. ¿Cómo oraba la Virgen María?

Con fe y la ofrenda generosa de todo su ser a Dios. Ruega a Jesús, su Hijo, por las necesidades de los hombres.

547. ¿Existe en el Evangelio una oración de María?

La intercesión en Caná de Galilea, el Evangelio nos entrega el Magnificat (Lc 1, 46-55), que es el cántico de la Madre de Dios y el de la Iglesia, la acción de gracias gozosa.

Imagen: La Oración en el huerto, GIULIO CESARE PROCACCINI, 1616-1620. Museo Nacional del Prado.