Autor: centroeuropa

Credo 11: La caída: el pecado de los ángeles y los hombres

74. Satanás y los otros demonios rechazaron a Dios, mediante una libre e irrevocable elección, dando así origen al infierno. Intentan asociar al hombre a su rebelión, pero Dios afirma en Cristo su victoria.

75. Por el primer pecado, el hombre, tentado por el diablo, quiso «ser como Dios» (Gn 3, 5). Adán y Eva perdieron, para sí y para todos sus descendientes, la gracia de la santidad y de la justicia originales.

76. El pecado original, en el que todos los hombres nacen, es el estado de privación de la santidad y de la justicia originales. Es un pecado «contraído» no «cometido» por nosotros; es una condición de nacimiento.

77. Como consecuencia del pecado original, la naturaleza humana se halla herida, sometida a la ignorancia, al sufrimiento y a la muerte, e inclinada al pecado. Esta inclinación al mal se llama concupiscencia.

78. Dios no ha abandonado al hombre al poder de la muerte, antes al contrario, le predijo que el mal sería vencido y el hombre levantado de la caída. Por ello, la caída será incluso llamada feliz culpa.

Cuestiones disputadas:

De dónde salió la esposa de Caín. Puesto que en este tema se habla de Adán y Eva, aparece la pregunta de si se casaron entre sí sus descendientes, lo cual parece necesario para que sean los padres de toda la humanidad.

Credo 10: El hombre, imagen y semejanza de Dios

66. El hombre es imagen de Dios porque es capaz de conocer y amar libremente a su Creador. Única criatura terrenal a la que Dios ama por sí misma, ya que solo a ella la invita a compartir su vida divina. Por eso es persona, capaz de conocerse y de darse a otros, entrando en comunión con ellos.

68. Los hombres forman una unidad porque tienen el mismo Creador y Salvador, y están llamados a compartir la felicidad.

69. Espíritu y materia forman una única naturaleza. Gracias al principio espiritual (alma), el cuerpo material se hace viviente, humano y participa de la dignidad de imagen de Dios.

70. El alma espiritual es creada directamente por Dios y es inmortal.

71. Hombre y mujer tienen la misma dignidad y son complementarios: está creados el uno para el otro, para vivir en comunión, transmitir la vida, ser una sola carne en el matrimonio y dominar la tierra.

72. Hombre y mujer fueron creados en estado de santidad y justicia con una especial participación de la vida divina: en armonía perfecta consigo, entre ellos, con Dios y la Creación, no debían sufrir ni morir.

Sacramentos 6: La Eucaristía en el designio de salvación

271. La Eucaristía es el sacrificio mismo del Cuerpo y Sangre de Jesús que Él instituyó para perpetuar el sacrificio de la Cruz. Es el memorial de su Muerte y Resurrección, signo de unidad, vínculo de caridad, banquete en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da la prenda de la vida eterna. Seguir leyendo «Sacramentos 6: La Eucaristía en el designio de salvación»

Moral 7: Bien común y justicia social

(LA PARTICIPACIÓN EN LA VIDA SOCIAL. Continúa)

407-8-9-10. Bien común es el conjunto de condiciones de vida social que hacen posible la perfección a los grupos y sus miembros. Supone el respeto de los derechos fundamentales de la persona, de los bienes espirituales y temporales, la paz y la seguridad de todos. Todo hombre participa en su realización respetando las leyes justas y asumiendo su responsabilidad personal, familiar, y de trabajo y actuando en la vida pública. Seguir leyendo «Moral 7: Bien común y justicia social»