Si en el domingo 28º del Tiempo Ordinario las lecturas nos indicaban que la verdadera sabiduría consiste en seguir a Cristo, las del domingo 29º (ciclo B) nos precisan que no es por nuestras propias fuerzas -como sugerían los apóstoles Santiago y Juan al responder: ¡podemos!- como seguimos a Cristo, sino por la misericordia de Dios. Cristo ha sufrido por nosotros para allanarnos ese camino. La misericordia en raras ocasiones (como fue la de los hermanos Cebedeos) vendrá a abajar nuestras ínfulas para recordarnos que solos no podemos nada, será más frecuente que venga a recordarnos que gracias a Él sí podemos.
Además, María es Madre de Misericordia y nos recuerda con su presencia que nos tiene en su regazo y que cuenta con que seamos sus intercesores, como en Guadalupe le dijo a San Juan Diego. Por cierto que en México el Año Jubilar Guadalupano ha terminado el 12 de octubre de 2021, mientras que en España el Año Jubilar Guadalupense (por caer el 6 de septiembre en domingo) se extenderá hasta el 10 de septiembre de 2022.
El padre Santi centra su comentario de hoy en lo que dice Jesús al final de que mandar es servir:
El padre Borre une ambos aspectos al afirmar que el verdadero poder es ayudar a los demás: